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Los tipos de hipotecas más comunes

Comprar una nueva vivienda es algo que toda nueva pareja desea, sin embargo, no para todos es posible. Es por ello que, una de las mejores opciones para comprar una vivienda sin tener el dinero completo, es solicitar un hipoteca. Existen muchos tipos de préstamos hipotecarios que te pueden llegar a ser mucha utilidad, sin embargo, es importante que conozcas cada uno de ellos. Esto, va a permitirte que puedas elegir el que mejor se adapte a tus necesidades.

¿Cuáles son los principales tipos de de hipotecas?

1. Hipotecas convencionales

Una hipoteca convencional es un préstamo hipotecario tradicional, es decir, el cual es entregado principalmente por una institución bancaria. También puede ser entregado por un prestamista privado y en este caso, el prestamista entrega cierta cantidad de dinero y la persona que lo recibe, deberá entregas el capital más un porcentaje de interés adicional.

Por lo general, los prestamistas exigen que se pague un seguro hipotecario privado en muchos préstamos convencionales cuando se pone menos del 20 por ciento del precio de compra de la vivienda.

2. Hipotecas Jumbo

Las hipotecas Jumbo son tipos de hipotecas convencionales que tienen límites de préstamos no conformes. Esto significa que el precio de la vivienda supera los límites federales de préstamo. En 2021, el límite máximo de préstamo conforme para viviendas unifamiliares en la mayor parte de Estados Unidos es de 548.250 dólares. En ciertas zonas de alto coste, el límite es de 822.375 dólares. Los préstamos jumbo son más comunes en las zonas de alto coste y, por lo general, requieren una documentación más detallada para poder optar a ellos.

3. Hipotecas a tipo fijo

Las hipotecas de tipo fijo mantienen el mismo tipo de interés durante toda la vida del préstamo, lo que significa que la cuota mensual de la hipoteca es siempre la misma. Los préstamos fijos suelen tener plazos de 15, 20 o 30 años. Esta suele ser la mejor opción para aquellas personas que no quieren arriesgarse y prefieres pagar un cuota fija durante toda la vida de la hipoteca.

4. Hipotecas de tipo variable

A diferencia de la estabilidad de los préstamos de tipo fijo, las hipotecas de tipo variable tienen tipos de interés fluctuantes que pueden subir o bajar según las condiciones del mercado. Muchos productos de tipo variable tienen un tipo de interés fijo durante unos años antes de que el préstamo cambie a un tipo de interés variable durante el resto del plazo.

Otros tipos de préstamos hipotecarios

Además de los tipos comunes de hipotecas de los cuales te he hablado, hay otros tipos que puedes encontrar cuando busque un préstamo. Si bien es probable que estos préstamos no sean tan comunes, lo cierto es que pueden llegar a ser muy interesante. Estos préstamos son:

Préstamos para la construcción: Si quieres construir una casa, un préstamo para la construcción puede ser una buena opción. Puedes decidir si deseas obtener un préstamo para la construcción por separado para el proyecto y luego una hipoteca separada para pagarlo, o si prefieres combinar los dos. En general, se necesita un pago inicial más alto para un préstamo para la construcción y una prueba de que puede pagarlo.

Hipotecas de sólo interés: Con una hipoteca de sólo intereses, el prestatario sólo paga los intereses del préstamo durante un periodo de tiempo determinado. Una vez transcurrido ese periodo, que suele ser de entre cinco y siete años, la cuota mensual aumenta a medida que se empieza a pagar el capital. Con este tipo de préstamo, no se acumula patrimonio tan rápidamente, ya que al principio sólo se pagan los intereses. Estos préstamos son mejores para quienes saben que pueden vender o refinanciar, o para quienes pueden esperar razonablemente poder pagar la cuota mensual más alta más adelante.

Hipotecas globales: Otro tipo de préstamo hipotecario con el que te puedes encontrar es una hipoteca global, que requiere un gran pago al final del plazo del préstamo. Por lo general, los pagos se basan en un plazo de 30 años, pero sólo durante un corto período de tiempo, como siete años. Al final de ese tiempo, tendrás que hacer un gran pago sobre el saldo pendiente, que puede ser inmanejable si no estás preparado. Puedes utilizar la calculadora de hipotecas globo para ver si este tipo de préstamo tiene sentido para ti.

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